Friday 30 May 2014

Cosas que nadie te dice cuando estás embarazada de tu primer hijo/a

Esta es una traducción/adaptación del post "15 Things About New Motherhood That People Are Too Nice to Tell You When You're Pregnant". Vale la pena leerlo completo, pero acá sólo voy a poner algunos puntos.

Lo cierto es que, entre las dichas de la maternidad, hay mucho que no se dice. No me queda claro si las madres experimentadas no te cuentan cosas porque son buena gente y no quieren asustarte antes de tiempo, o porque es una especie de gran tabú el quejarse o hablar de los aspectos malos de la maternidad. Que existen, por supuesto, que nadie diga lo contrario.

Tal y como advierte el artículo: si no quieres que se reviente tu burbuja de dicha y felicidad, no sigas leyendo.

Aquí van:

1. Tu parto está fuera de tu control. No importa cuánto planifiques, a cuántas clases asistas y cuánto convenzas a la gente que cesárea/parto natural es lo mejor para todos. Llegado el momento, va a pasar exactamente eso que no se te ocurrió que pasaría. Y nada de lo que suceda va a estar bajo tu control, excepto, quizás, el pujar si es parto natural.

5. "Vas a darte cuenta que hay algunos problemas (como hacer que el bebé duerma)  que no tienen solución, a pesar de que, de manera equivocada, te van a hacer creer que sí hay soluciones, a través de todos los consejos a tu disposición. Esta frustración -- el hacerte pensar que tienes el control cuando, en realidad, no lo tienes -- es (casi) tan mala como los mismos problemas."

6. "Del mismo modo, te venden la idea que tú y tu recién nacido tienen un nexo especial y que ambos se conocen el uno al otro gracias al tiempo que él o ella pasó creciendo en tu barriga. Si esto es cierto para ti, bien, pero no lo es para todos. Estás cansada y no tienes idea de lo que estás haciendo. El bebé está cansado y no tiene idea de lo que está haciendo, ni tiene la habilidad de mostrar ningún tipo de amor o gratitud. Todos están a tu alrededor preguntándote si te sientes emocionada por la vida que has creado y si estás loca de felicidad y, en secreto, puede que pienses: no, no lo estoy, no realmente, pero debería estarlo, así es que tal vez soy malísima por no sentirme de ese modo." Relájate, respira, tolera que no todo es amor y felicidad... y no tires a tu pequeño o pequeña por el balcón, aunque la tentación sea grande (y tampoco trates de tirar a las tías bienintencionadas).

9. "Vas a estar demasiado cansada como para decirle a las personas cómo pueden ayudarte. Estas son algunas posibilidades:

  • Lavar la ropa
  • Doblar la ropa (¡Gracias!)
  • Hacer compras por ti
  • Guardar los platos
  • Sacar a pasear al perro
  • Traer comida
  • Traer papel higiénico
  • Quedarse con el bebé mientras tomas una siesta o vas a caminar sola."

10. "Durante esa caminata, vas a considerar seguir caminando para siempre y nunca regresar."

11. "Vas a estar demasiado cansada y confundida para siquiera darte cuenta de lo que quieres o necesitas. Estar sola en casa es aburrido y solitario, y tener invitados es abrumador, incluso en las mejores situaciones. Así es que te pones a llorar."

15. "Eventualmente sentirás un tipo de felicidad que nunca antes has sentido y vas a entender todos los clichés de ser padre.Este tipo de placer simplemente no llega tan pronto como se supone que debería ser. Pero termina llegando, y es importante terminar en un tono feliz."

Thursday 22 May 2014

Dormir al bebé (Primera parte)

Algunos bebés tienen problemas para comer. A otros, toma media hora sacarles un chanchito. Otros, se mueven tanto al cambiarlos que colocar un pañal como se debe es un logro.

El mío cree que dormir es opcional. La curiosidad le gana. Ya sea una voz, un ruido, una luz, un color, cualquier excusa es buena para abrir completamente los ojos justo cuando estoy casi segura que ya se durmió. 

A la par que mi pequeño retoño aprende a reconocer la voz de su mami, a sonreír y a estar despierto, yo aprendo el sutil y delicado arte de dormirlo. Me está entrenando y ambos lo sabemos. 

Primero, es necesario estar segura que lo que tiene es sueño. No hambre o un pañal sucio. Si no es sueño, no sólo los intentos de dormirlo no van a funcionar: se va a poner de mal humor (y yo probablemente termine agotada). 

¿Cómo saber si efectivamente es sueño? Aún no lo sé. Y sospecho que sea lo que sea, varía de bebé a bebé. Ante la duda, sólo queda descartar todo lo demás.

Es largo, trabajoso y requiere paciencia. Ya lo dije: un arte.

Saturday 10 May 2014

Leche materna

¿Qué se siente dar de lactar?

(marketingmama.com)
Para algunas es la experiencia más maravillosa de conexión con el bebé. Sí, sin duda lo es. Tiene sus indescriptibles aspectos positivos y, durante el primer mes, hay pocas cosas tan satisfactorias como ver la cara de "ahora sí que estoy lleno" del pequeño infante, luego de haber estado un buen rato usándote como fuente de alimentación.

En algunos sitios de maternidad advierten que puede ser un poco doloroso. En otros, dan tips para tener más leche (tomar cerveza, tomar agua, ducharse con agua tibia antes de dar de lactar, usar ropa ancha, etc.).

Pero pocos mencionan la cruda realidad: dar de lactar es aburrido.

[Tías, no me miren feo. Yo sé que lo extrañan, pero acuérdense cómo era en realidad. Admitan que ustedes también se aburrieron.]

Puede demorar entre 20 minutos y 2 largas horas (el record de mi pequeño pokemón) y durante ese rato es bastante complicado hacer otra cosa. Por dos razones: funcional y afectiva. Tienes las dos manos ocupadas y cualquier maniobra a realizar implicaría algún tipo de postura que te permita liberar una, lo cual complica todo el proceso. Pero la peor es la culpa. Este es el momento en el que estoy construyendo mi relación con mi bebé, ¿debería estar respondiendo ese sms? ¿está mal que mire un partido de futbol? ¿soy una mala madre por estar aburrida?

Acá hay un post bastante bueno con respecto a qué piensa una mujer mientras da de lactar. Sólo hay una cosa con la que no estoy de acuerdo: 44. Larga vida al extractor de leche y a sus múltiples ventajas, entre ellas, ratos de paz en los que no soy la única indispensable.

[Aunque, admitámoslo, es bonito sentirse taaan indispensable].

Monday 14 April 2014

Contracciones

lorzagirl.blogspot.com
He encontrado que es muy difícil explicar un dolor. Es como tratar de definir un olor. Son cosas imprecisas, subjetivas, y nos falta palabras para poder plasmar y transmitir a otros cómo fue. Entonces tratamos de recurrir a comparaciones, pero eso tampoco funciona muy bien, porque aún si nos referimos a algo que dos personas conocemos, nuestra percepción de ese algo puede variar, y mucho.

Es así que mis intentos de describir una contracción puede que sean inútiles. No lo voy a intentar.

En realidad, da igual cómo sea. Duele, y mucho. 

Lo que interesa de las contracciones, lo que las hace verdaderamente surreales, es que durante ese extraño momento llamado "trabajo de parto" uno quiere tenerlas. Si estás en trabajo de parto, dilatando, esperando que tu retoño quiera salir, lo mejor que puede pasar es que esas contracciones vengan, y que sean largas, seguidas y dolorosas. Eso significa que todo va bien... y que ya va a acabar. Lo mejor que puedes desear entonces es aguantar lo más posible antes de suplicar por la epidural. 

Debe ser uno de los momentos más masoquistas de la vida de una persona.

Wednesday 2 April 2014

Descanso pre-natal

Imagino que si hubiera tenido que ir el lunes pasado a trabajar, me habría quejado todo el fin de semana, todo el camino a la universidad y tal vez incluso un poquito en clases. Me habría sentido pesada, acalorada, y con la convicción de que el mundo está en mi contra.

No estoy muy segura que estar en descanso pre-natal sea mucho mejor. A una semana de la "fecha de lanzamiento", mi pequeño - que ya no es pequeño - no parece estar nada descontento con la situación. Crece feliz a costa de su madre y no da señales de querer salir.

¿Y la madre? Simplemente no sabe qué hacer con su tiempo. Toda la ropita ya está, y ha sido ordenada y clasificada por tallas, colores, tipo de tejido, peso específico del material y nuevamente por talla. El famoso maletín de la clínica está re-listo y ya no se nos ocurre qué más ponerle, excepto quizás unas latas de atún y una linterna, para que también sirva como mochila de seguridad en caso de sismo.

El cuarto está casi listo - lo que falta no depende de mí - y el moisés ya está colocado en su lugar.

Y sé que en muy pocos días extrañaré la paz y tranquilidad, los largos paseos, la piscina y los cafés sin apuro (descafeinados). Pero ahora, honestamente, me aburro. Y no me molestaría dictar una clasesita o dos.

Sunday 19 January 2014

Energía

Hay quienes dicen que, durante el tercer trimestre, las embarazadas tienen muchísima más energía. Hay quienes dicen que en realidad es menos, porque una siempre está cansada. 

Estoy empezando a comprobar una nueva teoría: la cantidad de energía es la misma que la de una mujer no embarazada. El problema es que esta está muy mal distribuida. 

Arranca el día y una, con un poquito de esfuerzo, salta ágilmente de la cama... o se arrastra fuera del colchón como una tortuga puesta al revés, lo mismo da. En menos de media hora ya está bañada, llena de cremas para las estrías, vestida, linda y lista para atacar el mundo. Todo esto sin una gota de cafeína en el sistema.

Un par de horas después ya revisó su(s) mail(s), leyó dos o tres periódicos de interés, comentó las noticias sintiendo que sus opiniones son dignas de comentarista de la BBC, quedó con un par de amigas para tomar tecito de hierbas más tarde y hasta le puso "Aceptar" a las actualizaciones de iTunes y Acrobat.

newbiemom.com
Y llega la media mañana. La sensación es como de desinflar un globo. ¿Por qué no existe una ley que obligue a los centros de trabajo a poner hamacas para una pequeña siestecita matutina? ¿Es mucho pedir que, mientas casualmente parezco mirar fijamente la pantalla, pero en realidad estoy profundamente dormida, nadie me hable por unos 20 minutos? Aparentemente sí.

De algún modo, la pobre embarazada sobrevive hasta la hora de almuerzo y se arrastra hasta su plato. Y, si es afortunada, finalmente logra hacer su siesta. Este era un evento relajante y refrescante en los períodos pre-embarazo. Una se estiraba, cerraba los ojos, y despertaba unos minutos después, fresca como una lechuga, sintiéndose linda y llena de energía para afrontar lo que quede del día.

Ahora no. Ahora despertarse toma una buena media hora. Y una hora más hasta que una deje de sentir que el cerebro le funciona en cámara lenta. Y una media hora más hasta que se sienta en capacidad de mandar mails importantes o entrar a reuniones cruciales. ¿Qué tanto daño puede hacerle a mi bebé una tacitititita chiquitititita de café expreso triple shot?

Y luego, como por arte de magia, una se encuentra despierta, tarareando la canción que esté en la radio (o bailando los pasos de Thriller que una mágicamente recuerda desde la oscura era de los 80), escribiendo al mismo tiempo mails de trabajo, whatsapps, respuestas a inbox de facebook y posteando artículos interesantes (o escribiendo en su blog). Una se encuentra llena de vida, de energía, de creatividad, lista para escribir una novela, escalar una montaña (bajita, por favor) y pintarse las uñas, todo al mismo tiempo, mientras piensa en el color de las invitaciones para el baby shower y en que no será necesario llamar a un pintor para el cuarto del bebé, si una misma lo puede hacer y ahorrarse unos cuantos.

Hasta que, de pronto, son las 8 de la noche, o algo así. Y una, simplemente cae. Dormida antes que la cabeza toque la almohada.

Friday 17 January 2014

Tres preguntas (+ una)

Cuando la barriga se hace más visible y las náuseas hacen que una ya no se vea verde todo el tiempo, son tres las preguntas que TODO-EL-MUNDO hace.

¿Cómo va la panza?

¿Es hombre o mujer?

¿Ya tiene nombre?

Estoy pensando seriamente hacerme un polo (talla XXL, porque nada me queda estos días) que diga:

Bien, gracias.

Hombre.

No.

Ahí es cuando viene la pregunta "bonus":

¡¡¡¿¿¿TODAVÍA NO TIENE NOMBRE???!!!

Friday 3 January 2014